MONÓXIDO DE CARBONO PARTE 1

Defensa civil presenta consejos y datos para los chicos, para que la prevención en el hogar la hagamos en familia

“La prevención en el hogar es clave, ya que la mayoría de los accidentes se producen por descuidos que pueden ser evitados. En esta oportunidad presentamos la primera entrega de consejos para los más chicos, si todos tomamos conciencia y nos cuidamos, podemos vivir mejor”, expresó Guillermo Bonafina, subsecretario de seguridad y emergencias.

¿Qué es el monóxido?

Cuando respiramos, el aire que entra por la nariz y la boca nos da oxígeno y nos hace muy bien, hace que podamos pensar, correr, caminar, jugar y muchas cosas más. Pero a veces en lugares cerrados donde hay artefactos a gas, si no tenemos cuidado, el oxígeno se mezcla con el monóxido, un gas que no podemos ver ni oler, como un fantasmita que nos viene a molestar. Este gas nos hace doler la cabeza, vomitar, desmayarnos o cosas mucho más feas.

¿De dónde sale el monóxido?

De casa, de la escuela y de todos los lugares cerrados donde haya calefones, estufas, cocinas, hornos u otros artefactos de llama abierta que funcionen con gas. Si estos funcionan mal producen monóxido de carbono y el fantasmita que no podemos ver viene a hacernos mal ¡Ojo!

También el monóxido sale de los braseros, hogares o cocinas a leña o salamandras así como de los autos con el motor encendido, por ejemplo el garaje de tu casa.

Convertite en un genio en detectar monóxido, es muy fácil:

1. Controla con un adulto que la llama de estufas, calefones y hornallas de cocinas sea azul.  Si es amarilla, anaranjada, verde, o roja… algo anda mal
2. Pedí en tu casa que hagan revisar por un gasista matriculado, que es el experto en esto, los artefactos, ventilaciones, cañerías de evacuación de gases y cañerías de gas.

Juntos podemos cuidarnos y prevenir accidentes. ¡Tomemos conciencia!